Editors Fails

Hace poco nos llegaban noticias de frías tierras danesas contándonos la visita de los británicos, Editors a la capital, y poniendo los dientes largos a los madrileños, que aún debían aguardar unos días para nuestro turno.

El lugar elegido para tal espectáculo fue el palacio de Vistalegre, no sin un previo cambio de sala debido a la demanda del público, y es que Editors, tiene un gran séquito en tierras españolas.

A pesar de ello, su último disco explorando nuevos sonidos, y alejándose de su estilo personal y único, no termina de contentar a un público que añora sus primeros trabajos.

Pasaban de largo las 19.30, cuando el primer telonero elegido para ir caldeando el ambiente, Wintersleep, aparecía sobre el escenario sin pena ni gloria; y es que sus pretensiones de "fiesta" se quedaron en un triste intento, que aunque parecía gustar en ciertos momentos, no terminó de dar la talla. Cierto es que el palacio aún no lucía completo, pero no creemos que hubiera marcado una gran diferencia.


Tras los ritmos pop y soul de los canadienses, hacían su aparición los ingleses The Maccabees que aunque entusiasmaron algo más al público, el éxito de su actuación brillo por su ausencia. En su defensa destacamos los evidentes problemas sonoros que tuvieron su punto álgido durante Editors, que les impedía explotar la peculiar voz del cantante que apenas se dejaba oír.
Al menos consiguieron poner a la gente en la línea de salida.

Alrededor de las 21.30 y con el palacio más que a rebosar, los Editors hacían su aparición en escena. Bajo un mar de aplausos y vítores In This Light and On This Evening daba comienzo al tan esperado espectáculo.

Éxitos de sus trabajos anteriores como An End Has A Start, Blood, Bones y algunos de los nuevos temas con la etiqueta de "temazo" como You Don't Know Love, eran interpretados en lo que podemos pasar a llamar la primera parte del concierto.

Lentamente, grupo y público, empezaban a sintonizar el mismo dial cuando un más que inoportuno problema de sonido obligo a detener el concierto durante más de 10 minutos dando lugar a una primera parte de apenas media hora y unas pocas canciones.

El ánimo que tanto había costado subir al comienzo quedó apagado durante el resto del concierto solo exaltado durante cortos momentos en los que éxitos como The Racing Rats, Smokers Outside the Hospital Doors, Munich y la tan esperada Papillon desencadenaban la emoción del público.


Quizá para sus más fervientes admiradores fue un concierto redondo, obviando el problema técnico. Sin embargo, puede que la fina línea que separa sus anteriores discos del último marca una gran diferencia al unirlos sobre el escenario, o tal vez el orden elegido en esta ocasión para interpretar los temas no estaba lo suficiente pulido, o quizá simplemente porque un lamentable problema de sonido rompió la magia, los Editors no terminaron de prender la chispa que encendiera a su público, a pesar de que a este lado del mundo, el viento soplaba a su favor.

Galita.